La “nueva normalidad” se acerca y son muchos los cambios que se van a producir en el consumo audiovisual. Vamos a comenzar por los cambios en el uso de dispositivos y lo que se presume que pasará en los próximos meses.
Las webcams, videollamadas y conexiones a través de móvil, incluso en TV se han instalado, pero ¿definitivamente?. Todo esto nos recuerda a la entrada de las Go Pro y cámaras deportivas en TV. Antes impensables y ahora convivimos con ellas como una cámara más.
Analicemos peligros, ventajas y desventajas.
Peligros/desventajas:
- La entrada de estos dispositivos en el uso normalizado puede hacer ahorrar costes en puestos de trabajo como operadores de cámara.
- Caída a la mediocridad en calidad de contenidos. El público se acostumbra a lo malo y acabamos estandarizando la calidad de webcams y móviles. Considerándolo “lo normal”.
- Atracón de contenidos. En ningún caso se superará lo visto en el periodo de confinamiento, pero sí saldrán más contenidos que habrá que filtrar en preferencias de gustos y calidades.
- Prioridad del directo sobre el contenido cuidado. Tras instalarse el directo sobre todas las cosas, es probable que se prioricen los directos sobre el contenido offline cuidado. Aunque esto puede considerarse una ventaja.

Ventajas:
- Inmediatez. La posibilidad de la conexión por vídeo “a golpe de enlace” se normaliza. Se asumen como posibles, procesos que antes se consideraban más complicados o imposibles. Entrada de webcams en realizaciones, directos en 4 plataformas a la vez… Todo es posible, y ahora.
- Streaming low cost. El público muchas veces prioriza inmediatez a calidad. Esto sumado a que la mayoría de las plataformas emiten en 720p, hace que se puedan hacer streamings “visibles” a precios asumibles (+info aquí).
- Nuevos formatos como los que se descubrieron en confinamiento serán aun más visibles. Torneos de egames, tertulias online, plenos online…
En la parte 2 hablaremos de cómo afecta a los rodajes.
Próximamente…